Más del 50% de los consumidores de todo el mundo prefieren refrescos saludables, bajos en azúcar. Las bebidas carbonatadas pierden cuota de mercado en favor de otro tipo de refrescos, cócteles sin alcohol, smoothies y agua mineral aromatizada, entre otros.

1.- Recuperar los refrescos con sabores más tradicionales

Una de las tendencias más refrescantes y saludables pone en el punto de mira al agua con gas. Para la gran mayoría de los consumidores, un refresco sin burbujas pierde buena parte de la esencia del refresco. Sin embargo, prefieren versiones de estos libres de aditivos. Por ello, una de las opciones que despuntan de cara al verano de 2018 es la de añadir fruta fresca al agua con gas. Un refresco percibido como más natural y sano. Esta práctica tiene su origen en tierras italianas y se extiende rápidamente por todo el mundo.

2.- Cócteles sin alcohol para todos los públicos

Disfrutar de un cóctel colorido y adornado con sombrillas llamativas es una de las actividades favoritas para los cada vez más presentes after-works o locales en los que tomar una copa después del trabajo. Pero los consumidores prefieren restringir la ingesta de alcohol a los fines de semana o las ocasiones especiales. Por ello se popularizan los cócteles que mantienen todos los ingredientes de la mezcla original excepto el alcohol. Uno de los más exitosos es el mojito virgen, sin alcohol.

3.- Zumos naturales y smoothies

Si las marcas tradicionales de zumos popularizaron hace algunos años los batidos multifrutas, esta tendencia ha llegado al mundo adulto por fin. Existen locales en los que solo se sirven combinaciones de zumos de frutas y verduras. En estos establecimientos, la etiqueta «natural» es el reclamo. Cada combinación de ingredientes cumple una función. Así, hay zumos antioxidantes, energizantes, de vitaminas, desintoxicantes, etc. El smoothie es una versión del zumo de frutas en la que la base líquida puede ser leche (de vaca, de almendras u otras bebidas vegetales) o yogur. El resultado es un refresco más denso y saciante. En muchos de estos refrescos con sabores nuevos se añaden también algunos de los considerados superalimentos, como las bayas de gojí.

4.- Bebidas unicornio y refrescos con sabores

Si bien la costumbre de comer con los ojos es tan antigua como el propio dicho, los millenials le han dado una nueva dimensión. Se llama comida unicornio a aquella que presenta formas y, sobre todo, colores diferentes. La bollería, repostería y las golosinas son el nicho perfecto para este tipo de comida que se basa en la percepción del color y en las emociones asociadas al mismo. 2018 se revela como el año de las bebidas unicornio. Los refrescos de sabores diferentes presentan ahora colores diferentes también. En contraposición a la primera década del milenio, cuando la tendencia era crear alimentos de colores más neutros. Por ejemplo, batidos o yogures de color blanco independientemente del sabor.

5.- Reinvención del granizado: ahora con verduras

Las terrazas de verano siempre han contado con los clásicos granizados de fresa y limón como sus productos estrella. El granizado combina el frío del hielo picado con el sabor de la fruta y, por lo general, grandes dosis de azúcar añadido. Los granizados de verduras mantienen las propiedades refrescantes e hidratantes de los tradicionales. La novedad consiste en que los granizados de verduras como brócoli, espinacas o apio introducen un componente saludable que los convierte en un nuevo objeto de deseo. Tomarse un granizado deja de ser un capricho de media tarde y se convierte en un modo refrescante de velar por la salud.

6.- Bebidas energéticas para deportistas que se toman como refresco

Los estudios sobre hábitos de compra revelan que, igual que las mujeres se decantan por las bebidas light, los hombres prefieren las bebidas energéticas. También en este caso la versión sin azúcares va ganando terreno. Además, junto a las bebidas energizantes se hacen hueco, fuera de los gimnasios, las bebidas diseñadas para deportistas. Se trata de refrescos con sabores que incorporan sales minerales. De esta manera, el mundo de las bebidas entronca con la tendencia a incluir alimentos funcionales en el menú diario.

7.- Tés exóticos con sabores nuevos

El té rojo y el té verde revolucionaron el mundo de las bebidas saludables y funcionales hace unos años. En la actualidad, el té se renueva año a año y lo hace de dos maneras distintas. Por una parte, a nivel de marketing y diseño, se ha convertido en sinónimo de sofisticación y estilo de vida. Infusiones específicas que cambian su nombre por el de la función que cumplen, como té meditación o té saciante, apuestan por el cambio estético.  Por otra parte, la creación de nuevos sabores, como el té blanco con sandía o el té negro con ginseng, apuesta por la innovación en cuanto a sabores y sensaciones.

8.- El café revoluciona el mundo de los refrescos de sabores

Japón es, como en muchas otras cosas, pionero en la innovación relativa a bebidas refrescantes. Las calles de las grandes ciudades del país están llenas de máquinas expendedoras de comida rápida y refrescos de sabores. Entre ellos destacan las bebidas edulcoradas con sabor a té. Lo que no es extraño si consideramos que el té es la bebida nacional del país. Pero los japoneses también son muy aficionados al café. Por eso, esas mismas máquinas expenden latas de café expreso, café solo, descafeinado con o sin azúcar. Algunos supermercados europeos experimentan ya con estos productos. Son los sustitutos naturales al café caliente para llevar durante las estaciones más calurosas.

Beneficios emocionales de los nuevos refrescos

Hace unos años buscábamos en los estantes de los supermercados productos como las bebidas energéticas, que nos ayudaban a aguantar una jornada dura. Ahora la aspiración es mantener el equilibrio y la paz emocional, beneficios que prometen productos como los batidos vitaminados o los refrescos con té y otros ingredientes naturales que reducen el estrés y la ansiedad. Bebidas que ayudan a conseguir una buena sonrisa.

El mundo de los refrescos de sabores es cada vez más amplio y complejo. La tendencia del consumidor a exigir productos saludables se combina, en este caso, con la exigencia de colores y sabores atractivos. La comida y la bebida ya no son una necesidad, sino una fuente de placer. Por ello se buscan nuevas texturas y colores. De ahí el éxito de smoothies y de las bebidas unicornio. En Sensory Value somos expertos en test de producto y otras metodologías innovadoras que ayudan a entender al consumidor. Podemos ayudarte a saber cómo se percibe tu bebida refrescante por parte de los consumidores más tradicionales, pero también de las nuevas generaciones, que son las que determinan, en buena medida, los derroteros del mercado.