Sensory Bites // El ‘clean label’, el compromiso de la industria alimentaria para 2018

Publicada el 8 noviembre, 2017

 

Echar un vistazo a la etiqueta de cualquier producto alimenticio y encontrar más conservantes, edulcorantes y elementos químicos que componentes naturales, es la realidad que encuentran a diario muchos consumidores al hacer la compra y que cada vez más compañías intentan cambiar a través del ‘clean label’, el etiquetado limpio, que ha pasado de ser una tendencia a un estándar dentro de la industria alimentaria.

Según un estudio elaborado por C+R Research, un 69% de los consumidores considera que leer las etiquetas de los productos alimenticios tiene un impacto directo sobre sus hábitos de compra. En Estados Unidos, tres cuartos de los consumidores aseguran leer los datos nutricionales y alimenticios de las etiquetas para decidir si lo adquieren o no.

Retirar de los productos los ingredientes más artificiales y sustituirlos por otros similares de origen natural es una de las claves que abordará el sector alimentario en 2018. De hecho, compañías de reconocimiento internacional ya han llevado a cabo este tipo de cambios con el objetivo de acercarse más al consumidor y adaptarse a sus peticiones sin perder el sabor, la textura y el aroma característicos de cada producto. La clave: sustituir los colores, sabores y aromas artificiales con otros naturales.

The Impulsive Buy

La incorporación de los valores nutricionales en las etiquetas es también otro de los retos del sector de alimentación y bebida ya han iniciado, ajustándose sobre todo a la legislación europea y a las exigencias de los consumidores, que reclaman etiquetas comprensibles y únicas para todo el continente.

El etiquetado limpio, o ‘clean label’, no sólo ofrece la posibilidad de ser más transparentes y honestos con el consumidor, sino de aportar un producto más saludable. Cada vez más consumidores se decantan por productos alimenticios frescos y sanos, por eso es importante que cuando consuman un producto envasado sean capaces de encontrar, a través de la etiqueta, ingredientes reconocibles y que les apetezca tomar.

Es el caso de los helados. Su cremosa textura e intenso sabor puede reproducirse con ingredientes naturales. En Estados Unidos, una compañía de helados realizó una campaña publicitaria en la que anunciaba la renovación de sus famosos productos helados con el siguiente eslogan: “5 ingredients, one incredible indulgence”. El ‘clean label’ llega para quedarse.

 

 


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