Una taza de café por la mañana nos llena de energía para un buen puñado de horas. Puede que lo prefieras solo, con leche o acompañado de algún tipo de dulce pero, ¿te has preguntado alguna vez cómo se toma el café en el resto del mundo?

Escandinavia

Los países del norte europeo encabezan la lista de los cafeteros y consumen, por persona, más que en ningún otro país del mundo. Lo beben largo (más agua y menos café) y de tueste claro. La cultura cafetera escandinava se desarrolla entorno a la costumbre de la Fika: salir a tomar café y acompañarlo con un dulce. Por lo general, en compañía de amigos y en lugares agradables.

Turquía

Tanto el té como el café son bebidas calientes muy arraigadas en Turquía. Ambas se toman muy cargadas. El café, incluso, espesa el agua en la que se hace. El café turco se muele hasta que toma la consistencia de la harina y se sirve en tazas pequeñas sin asa, muchas veces de cristal.  Los turcos lo hierven dos veces y le añaden cardamomo y canela. Incluso tienen un antiguo dicho referente al café, que debe ser “negro como la noche, ardiente como el infierno, fuerte como el pecado y dulce como el amor”.

Japón

Japón adora el café. Allí se consume como bebida energética. Aunque cada vez más hay cafeterías de estilo occidental, los japoneses han dado con su propio modo de consumir sus dosis de cafeína diarias. En prácticamente cualquier calle de cualquier ciudad (y en ocasiones en medio de lo que un extranjero le parecerá ninguna parte) existen máquinas expendedoras de café enlatado. Sí, se vende en máquinas expendedoras. Frío o caliente, solo, con leche, dulce o amargo. Como un refresco más.

Estados Unidos

En Estados Unidos el café en filtro es el más popular. Se bebe en grandes vasos de papel y la cantidad de concentración depende del gusto de quien lo prepara. Es rara la película o serie de televisión en la que los protagonistas no se toman uno de estos cafés gigantes. Se trata de un modo tan popular de tomarlo que en los hogares ya se ha extendido la costumbre de llevarlos en termos del mismo tamaño que los vasos take away de las cafeterías.

Italia, cuna del café espresso

Es el lugar donde se abrió la primera tienda de café del mundo. Fue en Venecia en 1645. Además de tomar el café muy corto, muy caliente y la mayor parte de las veces amargo, los italianos han inventado postres como el tiramisú. Menos conocido es el affogato, un gran animador de sobremesas. Consiste en una bola de helado de vainilla bañada de café solo caliente. Hay quien la alegra con un chorrito de licor.

Francia

Al igual que en Alemania, el café francés suele formar parte del desayuno. En este caso acompañado de baguettes y croissants. Francia también cultiva la cultura del espresso, aunque en el norte del país se toma un poco más largo que en Italia. El lugar perfecto para los cafeteros franceses son las brûleries.

Emiratos Árabes

Si hablamos de Emiratos Árabes sin duda pensamos en lujo. Pues bien, la riqueza de este país se traslada también a sus cafés. Aquí puedes encontrar establecimientos que sirven clásicos capuccinos… con oro. Una forma diferente de acercarse a un básico del hogar.